viernes, 9 de febrero de 2018

RESEÑA: REINO DE LADRONES (CON SPOILERS)






Título: Reino de ladrones
Fecha de publicación: 2017 (en España)
Autora: Leigh Bardugo
Editorial: Hidra
Páginas: 656






ATENCIÓN: Esta reseña contiene spoilers de Reino de ladrones, incluso os puede arruinar el primer libro el hecho de leer la sinopsis, puesto que contiene (como es obvio) datos del final del mismo. Estáis avisad@s ❤.







Kaz Brekker y su equipo han dado un golpe tan temerario que ni siquiera ellos pensaban sobrevivir. Pero en lugar de conseguir una buena recompensa, a su regreso de la Corte de Hielo tienen que seguir luchando por sus vidas. Traicionado y debilitado, el equipo está corto de recursos, aliados y esperanza. Mientras poderosas fuerzas de todo el mundo llegan a Ketterdam para desentrañar el secreto de la peligrosa droga conocida como jurda parem, viejos rivales y nuevos enemigos emergen para desafiar el ingenio de Kaz y poner a prueba las frágiles lealtades del equipo. Una guerra se adueñará de las oscuras y tortuosas calles de la ciudad, una batalla por la venganza y la redención que decidirá el destino del mundo Grisha. 






L@s que me sigáis el instagram ya sabréis por las stories que he puesto a lo largo de la última semana todo lo que he sentido a lo largo de la lectura. Para l@s que no lo hagáis, os resumo brevemente: intriga, decepción, aburrimiento, emoción, tristeza y satisfacción. Sí, en ese orden justamente. Vale, sé que puede parecer que, por aparecer en esa pequeña lista dos emociones malas ya se puede vaticinar que la experiencia ha sido horrible, pero no. Es cierto que hasta aproximadamente la mitad del libro no he conseguido engancharme como sí lo había hecho desde el principio de la otra entrega, sin embargo, toda la segunda mitad ha contrarrestado ese aburrimiento (tampoco es que se me haya olvidado, hay que ser objetiv@s).



Mi reacción durante todo el libro 😂



En lo que al aspecto del libro se refiere, no tengo nada más que añadir que lo que comenté en la reseña pasada de Seis de cuervos: simplemente perfecto. Este libro en concreto, en vez de ser negro, es rojo, lo que hace que cuando se pongan los dos juntos, estos se contrasten entre sí. Me parece uno de los mejores trabajos de maquetación y edición que he visto nunca. Bravo, Hidra.

La trama del libro es lo que me confunde incluso ahora. Yo, nada más terminar la primera parte, pensaba que todo iba a girar en torno al rescate de Inej, y sin embargo no es así. Me alegro muchísimo, porque solamente forma parte del principio, y si la autora lo hubiera extendido, me habría parecido insoportable. En cambio, la trama principal que pensaba que tendía esta conclusión de la saga era el asunto de la jurda parem. Pero NO. Probablemente el elemento más relevante e interesante de toda la bilogía Grisha se queda inconcluso, sin una resolución digna para su tremenda originalidad. Me ha molestado, puesto que iba predispuesta a la lectura con la idea de que sucederían mil luchas por intentar que esta no cayera en las manos equivocadas, y lo que sucede en realidad es únicamente lo que concierne a Van Eck y sus asuntos personales (además de Pekka Rollins). La verdad es que lamento que un argumento tan sólido e increíble haya decaído hasta ser casi irrelevante. Creo que el rumbo que ha tomado no le hace justicia al potencial de la droga, cuyo poder se nos muestra al principio de Seis de cuervos y que, al menos a mí, me causó mucho respeto por lo que puede llegar a hacer, incluso a sabiendas de que no existe. Para mí, el mayor antagonista de la saga deberían haber sido la parem y la lucha de l@s malintencionad@s por conseguirla. 

Al igual que en Seis de cuervos, la pluma de la autora es impecable. No se detiene en detalles insignificantes, aunque sí que es cierto que he notado que en este sentido la secuela ha perdido su especificidad. Me he fijado en que Leigh Bardugo ha dado más importancia a la descripción, y eso está bien y mal al mismo tiempo. Bien porque te da un respiro entre tanta acción, pero mal porque puede causar pesadez en el lector. Pese a esto, su prosa es genial, y me fascina cómo plasma los pensamientos y la personalidad de los protagonistas. Además, la inclusión de flashbacks sigue tan impoluta como antes, y la ambientación exactamente igual de fantástica.







Y ha llegado el momento de hablar de los personajes. No me voy a meter a comentar de nuevo lo que pienso de cada uno de ellos, puesto que ya lo dije en la otra reseña y no he cambiado mi parecer respecto a ninguno. Sigo creyendo que los dos personajes más profundos son Inej y Kaz, y, por extensión, permanecen como mis preferidos. Lo que sí es necesario comentar es el desarrollo que han sufrido en torno a sus relaciones amorosas.

Kaz e Inej siguen sin mostrarse sus emociones directamente. Está claro que se quieren y que se preocupan por el otro, pero no vemos en ningún momento que se digan explícitamente "te quiero". No os hacéis una idea de lo frustrante que es ver esto y que ellos no hagan absolutamente nada. Gracias al cielo, al final Kaz demuestra (a su forma, claro) el cariño que siente por ella comprándole un barco para que cumpla con su sueño de venganza y justicia. Lo que me hizo una ilusión inconmensurable es el hecho de que Kaz llevara a la familia de Inej junto a ella, para que por fin tuvieran la reunión que, probablemente, sin su ayuda jamás habría acontecido. Ese momento es realmente emocionante, y no pude evitar soltar alguna lagrimilla, puesto que al mismo tiempo que leía cómo Inej estaba en casa por fin, pensaba que Kaz nunca podría hacer lo mismo con Jordie. En serio, sigo sin superar el trauma, porque cada vez que me viene a la mente me doy cuenta de lo duro que tiene que ser perder a un hermano 💔.

De la relación de Nina y Matthias he de decir que ha sido igual de angustiante (sobre todo por el final), puesto que entre la jurda parem y que no han tenido mucho tiempo para estar juntos, pensaba que no íbamos a ver su evolución. Me gustaban mucho menos que Inej y Kaz, eso no os lo voy a negar, aunque es principalmente porque me recuerda a las típicas historias de adolescentes en las que: chica conoce a chico, chico y chica se odian (en cada ocasión por un motivo distinto), chico y chica empiezan a hablar y se dan cuenta de que no son tan distintos, chico y chica comienzan a sentir algo por el otro y, finalmente, chico y chica se enamoran. Sigo pensando que es la pareja más arquetípica, no por ello mala, que conste (¿de menor interés para mí? Pues sí).






Y la última pareja de la que voy a hablar, pero no por ello menos relevante es la de Jesper y Wylan. Ni siquiera sé por dónde empezar. Son adorables, y si no fuera porque el nivel está muy alto, serían mis favs. Algo que creo que es muy importante es que son la representación pura de la diversidad, y no sabéis lo genial que es ver tal naturalidad en un libro de literatura juvenil. Creo sinceramente que, para integrar a las minorías y equipararlas al resto es sumamente imprescindible que se haga justo lo que Leigh Bardugo ha hecho. Y eso no es hacer literatura LGTB específica (cosa que no critico, es solamente que creo más conveniente esta otra forma de integración), sino crear una historia en torno a la cual giren de forma secundaria las orientaciones sexuales y los amores de l@s protagonistas, y no al revés. Así, será mucho menos importante el saber si va a querer a tal o a cual, puesto que nos fijaríamos más en si es una buena relación o no y en si realmente se quieren, independientemente de su sexo. Pero en fin, esa es mi visión personal del tema. En los comentarios me podéis dejar, si os apetece, vuestra propia opinión al respecto. Apartando esto a un lado, me encanta que Jesper y Wylan sean tan distintos, porque se complementan perfectamente, salvando las carencias de uno y de otro. Además, llevaba shippeándolos desde el inicio del primero, cuando se conocieron por primera vez y se notaba que se gustaban. También tengo que decir que su desarrollo es fantástico, ya que van desde un flirteo inocente a una relación profunda con una mutua comprensión impresionante en la que se nota que harían lo que fuera por el otro.

Cambiando de tema, ahora sí que tengo que contaros lo que me parecen ciertos personajes que, o bien no salían en el anterior, o bien no se habían desarrollado mucho. En primer lugar: Pekka Rollins. Qué horror de señor... ¿o no? Realmente no es malo. Si lo pensáis bien, es casi como Kaz pero con la mala suerte de toparse con un chico al que no debería haber destrozado la vida. Al fin y al cabo, estafó como hacía el cuervo normalmente, lo único que marca la diferencia es que mató de alguna forma a Jordan, aunque no fue de manera directa. Incluso podemos ver que tiene su corazón, puesto que quiere a su hijo como a nadie y está dispuesto a todo por protegerlo. En fin, me ha apasionado esta dualidad, que haya hecho que me cuestione todo y que, mirara por donde mirase sus acciones, no consiguiera concluir si me parecía malo o no tanto. En segundo lugar, Jan Van Eck no me ha causado el mismo efecto; él es directamente odioso. Entre lo que le hace a Wylan y a su madre, nos queda claro que es de lo peor. Encima es que se cree buenísimo en los negocios y anticipando los movimientos del resto, pero realmente es un patán. Me recuerda al típico que hace bullying por tener poca autoestima, vamos, que lo he detestado a más no poder. Y finalmente, el personaje que menos me ha gustado, aunque no por ser mala, sino por ser la más prescindible de toda la saga... Dunyasha (creo que se escribe así). Yo pensaba después de su primera aparición que sería invencible y que, de alguna forma, se uniría eventualmente a los cuervos. Pues no. Personaje plano donde los haya, sin historia, gracia e importancia. Puesta de relleno para que parezca que Inej no es tan buena como pensamos y que nos montemos un drama pensando que puede morir. Totalmente innecesaria, y una decepción por lo que podría haber sido y no fue. 






¡Casi se me olvida mencionar a Kuwei! Bueno, tampoco habríamos perdido mucho si no lo hubiera hecho. Kuwei es el personaje meh de la historia, es decir, el típico que te da igual si muere o si tiene un buen final. Al menos yo no me he llegado a encariñar con él, y tampoco es que esto sea un punto negativo, porque está bien que, como en el día a día, haya personajes que te dejen indiferente. Siempre viene bien un respiro de tanto amor y odio. 

Y ha llegado. El momento de hablar del cataclismo de lágrimas. Sí, estoy hablando de esa escena en la que estás pensando: la muerte de Matthias. No os voy a contar lo que pasa, pues ya lo sabéis. Solamente digo: auch. Me dolió muchísimo, y eso que, como ya os he comentado antes, Matthias no es el que más me gusta de los seis. No me dolió tanto el hecho de la muerte (que está claro que es dolorosísima), sino el último capítulo narrado desde su punto de vista, donde describe cómo, al morir, vuelve a casa y escucha el aullido de los lobos. Esa frase hizo que llorara a mares. Ahora voy a intentar ser objetiva, y he de decir que me parece una maravilla que muera uno de los seis. Esperad, no saquéis todavía las navajas. Me parece una maravilla porque sería MUY POCO realista que después de efectuar el robo más imposible y complicado de la historia y de ir en contra de mil personas (tanto de altos mandos como de la stadwatch) no hubiera ninguna baja en el grupo. En serio, me da muchísima rabia que pase eso, y hace que me salga de la historia por completo. Los finales felices están muy bien, pero no son para nada realistas, eso sí, tampoco es que queramos un apocalipsis mundial. En el caso de Reino de ladrones, ya es MUY optimista que únicamente muera uno. No me quiero ni imaginar si, en lugar de ser Matthias la víctima, hubiera sido Kaz. Después de eso sí que no levantaba cabeza. Y ahora, volviendo a mi subjetividad, tengo que decir... Madre mía, menuda puñalada al corazón más gratuita, Leigh Bardugo. Estoy por recluirme en un búnker y llorar hasta quedarme sin lágrimas.






Por último, hablemos del final. Sí, ha sido lo mejor de todo el libro. No solamente por los momentos que ya os he comentado como el reencuentro de Inej con su familia, sino por dejar un poco abierta la trama Kaz-Pekka, que te deja con ganas de más. Y sí, quieres que haya más historia después de Reino de ladrones, pero tampoco te deja una intriga insufrible ni una trama inconclusa, algo sumamente agradecible. Por ello, puedo decir que es una conclusión para la bilogía Grisha 10/10.



RESUMIENDO: Reino de ladrones es una conclusión bastante aceptable de la saga que comenzó con Seis de cuervos. Es verdad que su primera mitad es bastante lenta, e incluso se puede decir que aburrida en algunas partes, pero a partir de la página 260 aproximadamente, todo se empieza a animar. De hecho, tanto el final como algunas escenas inolvidables hacen que ese fallo se oculte un poco. Eso sí, hay algunos fallos como nuevos personajes planos y poco desarrollo de otros (Kuwei). En contrapartida, la edición es PRECIOSA, el resto de personajes siguen igual de brutales y el estilo de la autora, impecable. 




LO MEJOR: 

- Escenas memorables
- Las relaciones entre los personajes
- Su evolución
- La ambientación
- El estilo de la autora
- Giros de la trama
- Edición
- Personajes con una dualidad increíble
- Kaz e Inej 💕
- LA muerte




LO PEOR:

- Personajes planos y prescindibles
- Primera mitad lenta
- El no desarrollo de la jurda parem
- Jan Van Eck
- Trama confusa (parece que va a ir de una cosa pero luego va de otra distinta)
- Momentos un poco aburridos




PUNTUACIÓN:



CANCIÓN A LA QUE ME RECUERDA EL LIBRO:



 No sé por qué, pero me imagino a Kaz cantándosela a Inej 😂




¿Os ha gustado la reseña?, ¿habéis leído la saga? Dejadme lo que pensáis en los comentarios.



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